Las partes de una guitarra
La Cejilla: es el punto donde el clavijero se encuentra con el mástil de la guitarra, usualmente es un pequeño trozo de material (plástico, hueso, etc.).
Trastes: bajando por el mástil se encuentran pequeños surcos llamados trastes que guían las cuerdas de la guitarra desde el puente hasta el clavijero.
Mástil: es una parte del instrumento construido de cedro y es el área donde debemos prestarle más atención. Usted colocara sus dedos en varias posiciones del cuello para crear diferentes notas musicales. El mástil de la guitarra esta contigua a la caja o cuerpo de la guitarra.
Cuerpo o Caja: esta parte del instrumento puede variar dependiendo del tipo de guitarra. La mayoría de las guitarras acústicas y clásicas poseen un cuerpo ahuecado, y una boca de sonido diseñada para proyectar el sonido de la guitarra.
Cuerdas: estas juegan un papel primordial en la generación del sonido en el instrumento, son hechas de Nylon o metálicas dependiendo del genero musical que se desee interpretar y recorren la guitarra desde las clavijas sobre la cejilla, bajando por el mástil hasta llegar al cuerpo pasando por la boca de sonido y estas son sujetas a una parte de la guitarra llamada puente.
La caja de resonancia tiene forma de ocho y se prolonga con un mango sobre el que hay una pieza de madera o diapasón, dividido en diecinueve compartimentos o trastes. El fondo de la guitarra y su tabla armónica son unidos por medio de riscla o lados. En el centro de la mesa hay un orificio circular y en la parte inferior de la tabla armónica se encuentra el puente. En su forma actual más típica dispone de seis cuerdas pulsadas. Tres son de tripa y pertenecen al registro agudo; las otras son de seda, recubierta de metal, y pertenecen al grave; estas últimas son cuerdas hiladas. Actualmente son a menudo todas de nylon. Algunos intérpretes actuales, como Narciso Yepes o Michel Dintrich, emplean guitarras de diez cuerdas. La afinación de la guitarra, del grave al agudo, es mi, la, re, sol, si, mi. La procedencia de la guitarra es incierta; han sido apuntados un origen oriental o bien la derivación de las cítaras griegas y romanas, aunque, propiamente, fue creada en el Renacimiento. En la época medieval se distingue dos tipos en la Península Ibérica: la latina y la morisca.
A los s. XV y XVI la guitarra fue muy difundida en los Países Catalanes, bien que al fin fue sustituida por la vihuela y quedó limitada al repertorio popular. guitarra española © XAVIER Pintanel El primer tratado de guitarra apareció en 1586 y fue obra del catalán Juan Carlos Amat.
El s. XVII fue de decadencia, y no es hasta bien entrado el s. XVIII que Manuel García (conocido como el Padre Basilio) la introdujo en los ambientes aristocráticos. Entre sus discípulos se destacan Ferran Sors y Dionisio Aguado; en Italia fue cultivada por Mauro Giuliani (1781-1828) y en Madrid, por Boccherini. El fundador de la escuela moderna fue Francisco Tárrega. Otros virtuosos catalanes del s. XX son Miquel Llobet, Daniel Forteza, Emili Pujol, Alfred Romea y Graciano Tarragó y, en el resto de España, Andrés Segovia y Regino Sainz de la Maza. De las nuevas generaciones destacan Alirio Díaz y Narciso Yepes y, en Cataluña, Renata Tarragó. La música para guitarra fue escrita en cifra hasta el s. XVIII.